Como este año el tema
estadísticas se ha ido al garete, quiero hacer un resumen con poquitos datos para
saber cómo nos ha ido en estos cuatro meses, desde el cierre al público el 13 de marzo, hasta hoy Lunes 13 de Julio, dónde ya estamos en las 11 horas diarias de apertura.
Pero además, y aquí va a estar lo importante, también quiero explicar las
sensaciones y todo aquello que nos han ido trasmitiendo algunos usuarios
durante este tiempo. Por supuesto que tan sólo vamos a quedarnos con lo bueno, pues
de lo malo ya hemos tenido más que de sobra.
Cuando el pasado 12 de marzo los
acontecimientos se precipitaron, los últimos en marcharse lo hacían con pena, nos despedíamos con un hasta pronto, aunque todos intuimos que no iba a ser así. Incluso alguno se lamentaba: ¿qué voy a hacer yo si cierra la biblioteca?
En esas fechas, la rueda del
préstamo había dejado sin devolver más de 650 materiales de nuestra
Biblioteca. Tras paulatinas ampliaciones de
los plazos, la devolución de estos materiales prestados antes del estado de
alarma, se ha quedado fijado hasta la fecha tope del 15 de septiembre.
En cuanto a éste tema, lo cierto
es que ya vamos bastante bien. A día de hoy todavía quedan por volver a la
biblioteca unos 170 de esos materiales prestados hasta el 12 de marzo. Para
estos usuarios que todavía no han venido a hacer sus devoluciones, tendremos
que volver a métodos más tradicionales de contacto, como el teléfono e incluso el correo postal, porque la mayoría no
disponen de acceso a internet y por lo tanto no ha sido posible el envío de emails,
o que puedan ver nuestros avisos en las redes sociales.
Durante las primeras semanas, cuando la despensa de casa
obligada a salir, lo habitual era encontrarse con gente que te saludaba y
siempre acababa la conversación con la misma frase: ¡Ojalá esto acabe pronto y nos podamos ver en la biblioteca! Qué largo se hicieron los meses sin atender
presencialmente a nuestra gente.
Pero ocurrió que la Red de Bibliotecas de Castilla-La Mancha, amplió notablemente
la oferta de libros electrónicos disponibles en eBiblio, y además puso en marcha el
servicio eFilm Castilla-La Mancha. Así que a través de las redes sociales y por
correo electrónico, contactamos con todos aquellos que usan habitualmente la
biblioteca, para informar que tenían a su disposición miles de libros y
películas en descarga gratuita y legal, y eso tan sólo por tener el carnet de la
Biblioteca. Cuando alguien nos contactaba para pedir información o para que activáramos
su clave de acceso al servicio eBiblio, nos servía para quitarnos un poco el
gusanillo del trato directo con la gente.
Aunque la mayoría decían preferir el tacto del
papel, necesidad obliga, y un buen número se adaptaron a la pantalla para no tener que quedarse sin lectura durante tantos días.
Coincidiendo con el día del libro,
entre las muchas actividades propuestas, quizás la iniciativa más llamativa fuera el servicio Libros a tu puerta.
Durante algunas semanas, acercamos los libros a más de 30 domicilios, repartiendo incluso a dos o más miembros de algunas familias. Fue muy bien recibido, sobre todo por
los mayores de 65 años para los que el servicio seguirá funcionando, si así lo
prefieren.
Repartir de casa en casa para
llevar lectura, preguntar y ser preguntado por la situación o la salud, y un
poco de charla en cada puerta. En definitiva, llevar la biblioteca a la gente nunca
ha sido tan gratificante.
Y llegaron las fases de la
desescalada y cada vez que la provincia entraba en una nueva, las llamadas y
correos se multiplicaban para preguntar cuándo se podría ir a devolver los
libros que ya llevaban mucho tiempo por casa, pero sobre todo para saber cuándo
sería posible llevarse lecturas nuevas o poder entrar en la biblioteca para echar un
vistazo personalmente.
Así que desde el 8 de junio que reabrimos
al público, hemos tenido un constante ir y venir de reencuentros y charlas, pues lo que había era muchas ganas
de biblioteca, incluso en la situación en la que nos encontramos, porque en poco
más de un mes ya vuelven a estar fuera unos 250 libros y películas. Incluso hay
quien ya ha repetido visita, porque ha sabido a poco los cuatro libros que se
llevó en los primeros días de reapertura.
Cuando el año que viene tengamos
que rellenar la estadística de la Biblioteca, los datos no van a ser buenos, en
realidad ningún dato va a ser bueno en cualquier ámbito, así que vamos a quedarnos
con las buenas sensaciones, que aunque no se pueden cuantificar, son momentos
de calidad.